Dylan Purple, la fragancia epítome del verano de una chica Versace
Déjate llevar a un verano eterno con Dylan Purple, la nueva fragancia y campaña de Versace, repleta de brillo y elegancia, protagonizada por Iris Law.
Modelo y actriz británica, Iris Law fue naturalmente elegida por la misma Donatella Versace para ser el rostro de la fragancia por su energía, autenticidad y espíritu salvaje. La visión creativa de la campaña cobró vida en las mágicas playas de México donde precisamente se puede ver la intensidad y la sensualidad en cada toma y como representa perfectamente la escapada hacia islas lejanas.
En el vídeo de la campaña se ve a Law con su corte pixie rubio platinado y un estilo chic paseando por la playa con una fragancia en la mano en movimientos de cámara fluidos que rotan de una escena a otra, del amanecer al atardecer, de los trajes de bikini morado a los hermosos vestidos de fiesta, creando una sensación de «Versacesphere» envolvente.
Law define esta fragancia como un auténtico homenaje a la GEN Z porque representa una generación llena de vida y esperanza en el cual en el fondo tiene valores esenciales de calidad y sostenibilidad.
Este año Versace presenta su fragancia del momento Dylan Purple como una oda a las mujeres atrevidas y sofisticadas de todo el mundo. Es una explosión olfativa de color púrpura inspirada en la frescura y majestuosidad italiana. En palabras de la marca Versace, la fragancia inspira un verano sin fin, del amanecer al atardecer, para siempre Versace.
Con la llegada de la freesia morada crea una apertura fresca, afrutada y adictiva que rinde homenaje a los helados de Italia y a sus icónicos cítricos. El corazón floral representa una puesta de sol junto al agua; reflejos morados y una suave brisa perfumada.
El aroma, creado por el perfumista Christophe Raynaud, es fresco, delicado, vibrante y seductor. La composición floral-afrutada abre con notas chispeantes de naranja amarga y bergamota de Italia, pera. Se envuelve con un embriagador aroma de fresia morada y moléculas de pomarosa, mahonial y concluye con la potencia elegante del iso-e-super, ambroxan, belambre y sylkolide. Raynaud creó esta fragancia como una invitación a viajar.
El envase es de color púrpura brillante. Las elegantes curvas del frasco, recuerdan a un ánfora y evocan con fuerza la cultura y la mitología, clásicas que recorren profundamente la imaginación de Versace.
El tapón es de color dorado, y se visualizan las letras de estilo barroco, que deletrean el nombre de la firma italiana. A través de su enigmático frasco, Dylan Purple devuelve a Italia la felicidad simple, pura y sin adornos.