Narcolepsia: sueño excesivo
La narcolepsia es un trastorno poco común, se dice que una de cada dos mil personas lo padece. Aletargamiento, quedarse dormido en cualquier lugar, cierto tipo de alucinaciones y parálisis de sueño, son algunos de sus síntomas.
“Una profunda sensación de aletargamiento a lo largo del día, quedarse dormido en cualquier lugar, experimentación de cataplexia (cuando se pierde la sensibilidad de una parte del cuerpo), pérdida súbita del tono muscular tras una emoción intensa lo cual puede provocar caídas, son algunos de los síntomas que experimentan las personas que padecen narcolepsia”, comenta la doctora Margarita Reyes Zúñiga, especialista en trastornos del sueño.
Este padecimiento de origen neurológico también recibe el nombre de Síndrome de Gelineau. Es un trastorno muy poco frecuente, una 1 de cada 2 mil personas la padece y la proporción es igual en hombres que en mujeres, debido a que no tiene cura algunas personas optan por estimulantes y fármacos supresores del sueño para controlar los síntomas, además de los ya mencionados contemplan también:
- Alucinaciones hipnagógicas: es un estado mental donde uno ve, siente y oye cosas que aún no existen. Estas alucinaciones ocurren durante el estado de conciencia conocido en hipnagogia.
- Parálisis de sueño: mientras se duerme, se experimenta la sensación de llevar sobre el cuerpo en reposo, una carga pesada.
Su origen y diagnóstico
La experta afirma que la narcolepsia es causada por la disminución en el cerebro de las neuronas llamadas hipocretinas, que son las encargadas de regular el ciclo sueño-vigilia. Estas neuronas tienen la función de estimular a otras del tallo cerebral para mantenernos despiertos. Si hay una alteración, entonces nos quedamos dormidos en todos lados y a cualquier hora.
La especialista agrega que la narcolepsia está subdiagnosticada: “Hay muchos más casos sin diagnosticar, ya que los médicos no reconocen los síntomas y pueden pasar hasta 10 años antes de que se identifique el padecimiento”.
La narcolepsia se detecta por el cuadro de síntomas y estudios de sueño como la polisomnografía, que consiste en monitorear al paciente mientras duerme o trata de dormir. Otra prueba complementaria es por medio de análisis de sangre de laboratorio que detectan el gen HLA el cual no lo tienen los pacientes que sufren narcolepsia.
Para finalizar, la doctora Margarita Reyes enfatiza que es fundamental que la persona que la padece reciba tratamiento y control médico: “Es importante acudir al especialista en caso de padecer alguno de los síntomas. Los profesionales de la salud capacitados para hacer el diagnóstico son: el neurólogo, el psiquiatra y el especialistas en trastorno de sueño”.
Para mayor información:
Clínica del sueño, Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias
http://www.iner.salud.gob.mx/contenidos/clinica_sueno.html
* Ricardo Córdova, contáctalo en www.sermexico.org.mx [email protected]