¿El hombre de tu vida?
La magia que nos hace vivir el estado de enamoramiento, la atracción física y todo lo bello que esto engloba, no serán permanentes; a la larga encontraremos a nuestro lado una persona de carne y hueso, con defectos y virtudes, igual que nosotros. Antes de elegir a la pareja con quien deseamos pasar el resto de nuestra vida, sería conveniente realizarnos algunos planteamientos.
Elegir a la persona correcta, es una frase común que puede parecer eslogan publicitario; sin embargo, antes de tomar una decisión tan importante, sería conveniente pensar en qué es lo que realmente los mantiene unidos. Aquí te damos los nueve puntos básicos para saber qué tan sólida es tu relación.
Aceptación
Es la persona correcta si te agrada tal y como es, si no esperas que después del matrimonio cambie algún aspecto de su vida. Esperar que alguien cambie después de casados es uno de los errores clásicos de los enamorados. Nunca te cases con el potencial, la regla de oro es: si no estás contento con la persona así como ella es ahora, no te cases. Respecto a la espiritualidad de la otra persona, carácter, higiene, hábitos personales y forma de comunicación, debes estar segura de que puedes vivir con ellos en el estado en que se encuentran ahora.
Carácter
La química enciende el fuego, pero el carácter lo mantiene ardiendo. Ten cuidado con el síndrome “Estoy enamorado”, que generalmente significa “Tengo deseo”. La atracción está ahí, pero habrá que complementarla con el carácter de la pareja. Para conocer mejor a tu pareja puedes plantearte las siguientes preguntas, en cuestión de humildad: ¿esa persona cree que hacer lo que es correcto es más importante que la comodidad personal? Bondad: ¿disfruta de dar placer a otras personas?, ¿cómo trata a los demás?, ¿hace algún trabajo social voluntario?, ¿acostumbra dar caridad? Responsabilidad: ¿puedes depender de esa persona? Felicidad: ¿esa persona se quiere a sí misma?, ¿es emocionalmente estable?, ¿sabe disfrutar de la vida? Pregúntate: ¿me gustaría ser como esa persona?, ¿me gustaría procrear hijos con él?, ¿me gustaría que mis hijos se pareciesen a dicha persona?
Objetivos de vida
Compartir objetivos y prioridades de vida es uno de los factores que mantienen sólida una relación. Hay tres formas de conectarte con otra persona: química y compatibilidad, intereses comunes y compartir objetivos de vida similares. Debes asegurarte de que compartes el nivel más profundo de conexión que es el tener proyectos de vida en común. Esta es la definición de “almas gemelas”, un alma gemela es un compañero de objetivos, dos personas que comparten el mismo entendimiento del objetivo de la vida y, por lo tanto, compartirán las mismas prioridades, valores y metas.
Involucrarse sexualmente
Una de las desventajas de involucrarse sexualmente de manera prematura con tu pareja es que se pierden de vista aspectos fundamentales de la relación; los placeres carnales tienden a nublar los aspectos negativos de la pareja. En ese estado no se pueden tomar decisiones correctas. No es indispensable “probar” para darte cuenta de que una pareja es sexualmente compatible.
Conexión emocional
Es la persona correcta si ambos tienen una conexión emocional profunda. Para evaluar este punto realízate las siguientes preguntas: ¿respeto y admiro a la persona?, debes admirar en ella cualidades como creatividad, determinación, lealtad, etcétera. ¿Confío en esa persona?, ¿es estable emocionalmente?, ¿puedo depender de ella sin que me defraude?
Estabilidad emocional
Sentirnos emocionalmente estable con nuestra pareja resulta determinante. Hazte las siguientes preguntas: ¿me siento calmado, en paz y relajado con esa persona?, ¿puedo ser yo mismo y expresarme por completo con ella?, ¿me hace sentir bien sobre mí mismo? ¿Tienes miedo de esta persona?, no debes sentir que tienes que monitorear lo que dices; si tienes miedo de expresar tus emociones y opiniones abiertamente, hay un problema en tu relación.
Comunicación
Si entre ustedes platican todo y de todo, hasta de aquellos aspectos molestos o incómodos, logrando siempre acuerdos equitativos, los felicitamos, son la pareja ideal. Hablar sobre temas incómodos es una de las manera en las que se aprecia la comunicación, negociación y trabajo de equipo.
Problemas de la vida
La pareja correcta te ayudará a enfrentar los problemas de la vida o incluso a hacerlos más llevaderos; pero jamás te los resolverá. Pensar que una relación de pareja es un escape a los problemas cotidianos o a la infelicidad es un error. Si eres infeliz en tu soltería, probablemente será infeliz en tu vida de casado. El matrimonio no arregla problemas emocionales, personales ni psicológicos, por el contrario, puede llegar a incrementarlos.
Dependencia emocional
Tu pareja es la persona correcta si se encuentra libre emocionalmente; una persona que depende emocionalmente de alguien o de algo mientras trata de desarrollar una relación, no puede ofrecer nada a su pareja puesto que no será su prioridad.