¡Viva la Ciudad de México!
Nuestra nación es un territorio lleno de contrastes forjados a través siglos de historia, la cual se reúne en una sola ciudad que combina la belleza y sabiduría del pasado con el bullicio y movimiento de la modernidad: la Ciudad de México. Disfruten de su luna de miel conociendo la esencia de nuestra patria.
Cuando nos ponemos a pensar en los problables destinos para la luna de miel, las posibilidades son inmesas ya que hay un mundo lleno de alternativas qué ver y qué visitar. Muchos se inclinan por las cálidas playas de Hawaii, otros por lugares exóticos como Tailandia y algunos más por ciudades románticas como París; pero, en esta ocasión los invitamos a que disfruten de un divertido, interesante e inolvidable viaje de bodas recorriendo la ciudad más grande del mundo: la Ciudad de México.
La majestuosa Ciudad de México es mucho más de lo que vemos en las noticias; es un sitio en el que convergen los vestigios del Imperio Azteca, la belleza de la época colonial y la vanguardia de una gran urbe.
Ubicada en la meseta central del país y rodeada por lagos y montañas, esta ciudad es la capital financiera y cultural de México y un excelente destino turístico con muchos atractivos que gozar. En sus calles se pueden apreciar un interesante contraste arquiectónico producto de siglos de historia contenida en edificios, museos y monumentos.
El centro histórico
La Ciudad de los Palacios es otro de los nombres con los que conoce a esta ciudad y es que en la época colonial, los europeos trajeron sus conocimientos de arquitectura y construyeron varios palacios que embellecen el Centro Histórico como el Palacio de Minerías, el de Correos, el de Iturbide, el Palacio Nacional decorado con murales de Diego Rivera y el más célebre de todos, el Palacio de Las Bellas Artes. Este palacio es escenario artísico más bello del país, una mágnifica obra que combina el estilo Art Nouveau en su exterior y el Art Deco en el interior. En los muros de este recinto se pueden apreciar obras de grandes muralistas mexicanos como Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros, José Clemente Orozco y Rufino Tamayo, entre otros.
En el recorrido por el centro, otros de los sitios que vale la pena visitar es el Zócalo capitalino, la Catedral Metropolitana, el Museo de San Ildefonso, el Museo Nacional que muestra la evoloción de las artes plásticas en nuestro país, la Torre Latinoamericana desde la cual se puede observar una excelente vista panorámica de la cuidad más grande del mundo, y para pasar una amena tarde, nada mejor que tomarse un cafecito en en el Sanborns más famoso de la ciudad ubicado en la famosa Casa de los Azulejos.
México prehispánico
Uno de los principales atractivos del Distrito Federal, sin duda alguna, son los maravillosos vestigios de la gran Tenochtitlan, sede del Imperio Mexica que habitó esta zona y que a la llegada de los españoles fue destruida quedando sólo algunos restos de esta cultura enterrrados bajo tierra.
La esencia azteca brota de las entreñas de la gran ciudad y esto se comprueba con el Templo Mayor, principal recinto ceremonial de Tenochtitlan localizado en pleno Centro Histórico de la Ciudad de México, entre las calles de Argetina y Guatemala. Descubierto entre 1978 y 1982 mientras se realizaban las excavaciones para la construcción del metro. Este templo ceremonial cuenta con dos altares a la vista, uno en honor a Tláloc, dios de la lluvia y otro dedicado a Huitzilopochtli, dios de la guerra. Los objetos que fueron encontrados en su interior están a la vista del público en el Museo del Templo Mayor, siendo el prinicipal atractivo del museo el monolito de la diosa Coyolxauhqui.
Otros de los sitios arqueológicos más importantes es Teotihuacan, situado en el estado de México, a solo 45 minutos de la Ciudad de México. Ésta es una monumental ciudad prehispánica cuyos orígenes datan desde el año 800 a.C., siendo hasta el periodo comprendido entre los años 250 a 650 d.C., cuando alcanzó su mayor apogeo.
Los atractivos de este sitio son las pirámides del Sol y de la Luna, la Calzada de los Muertos y los Templos de Quetzalpapalótl y el de Quetzacóatl, así como el Palacio de los Jaguares y la Ciudadela. Es recomendable realizar el recorrido por este lugar en compañía de un guía especializado que los ilustrará más acerca de este maravilloso sitio en el que el espirítu de nuestros antepasados se mantiene vivo.
Chapultepec
Durante su estancia en la capital del país uno de los puntos que no deben dejar de visitar es el área del Bosque de Chapultepec en donde se encuentra el Castillo de Chapultepec, lugar que ha sido un importante escenario en la historia de México. Su construcción se inició en 1785, cuando gobernaba la Nueva España el virrey Bernardo de Gálvez, quien ordenó la edificación de una residencia en la punta del cerro de Chapultepec.
Posteriormente, se convirtió en Colegio Militar y fue uno de los puntos cruciales durante la invasión de Estados Unidos a tierras mexicanas en 1847. Fue alrededor de 1867 cuando el emperador Maximiliano de Habsburgo llegó al país y le dio una nueva fisionomía a esta construcción, dando origen a hermoso castillo digno de la realeza. Durante el mandato de Porfirio Díaz, el Castillo de Chapultepec alcanzó su máximo esplendor y se convirtió en la residencia de varios presidentes entre los que se encuentran Francisco I. Madero, Venustiano Carranza, Álvaro Obregón, Plutarco Elías Calles, Emilio Portes Gil, Pascual Ortiz Rubio y Abelardo Rodríguez. Fue el presidente Lázaro Cárdenas quien lo donó a la nación en 1940 y se convirtió en el Museo de Historia Nacional.
Para contuinuar con el paseo por Chapultepec es muy recomendable vistar el Museo de Antropología e Historia, compuesto por 24 salas en las que se encuentra la colección de arte precolombino más grande del mundo. En este museo se puede tener un interesante encuentro con la historia y se aprecia más cercana y detenidamente la majestuosidad de las culturas prehispánicas que existieron en nuestro país.
Y por último, pueden disfrutar de una divertida tarde el Zoológico de Chapultepec.
Arte, arte y más arte
Si ustedes son amantes de las arte, la Cuidad de México será una verdadera delicia ya que cuenta con un gran número de museos y actividades artísticas para disfrutar. Algunos de los museos que pueden visitar son el Museo Rufino Tamayo,el Museo de las Artes Populares, el Museo de Arte Moderno y el Museo Franz Mayer, el cual es poseedor de una fabulosa colección de arte decorativa en cerámica y plata, de igual forma resguarda obras pictóricas y escultóricas de México, Oriente y Europa.
Para pasar una deliciosa tarde bohemia la mejor opción es Coyacán, lugar en el que podrán disfrutar de un cafecito, comprar libros y visitar la Casa Museo de Frida Kahlo, también conocida como la Casa Azul. Este lugar es famoso por que fue la residencia de Frida y Diego por muchos años; la mayoría de los espacios se conservan intactos. Si son admiradores del arte de esta célebre pareja de pintores pueden acudir al Museo Dolores Olmedo, que alberga una amplia colección de pinturas de Diego y Frida.
Otras opciones a visitar en su recorrido cultural son la Casa Lamm, el Polyforum Cultural Siquieiros y la Casa de la Bola.
Y si quieren divertirse como enanos, visiten el Museo de Papalote, que se carateriza por ser un museo interactivo en el que los vistantes pueden tocar, experiementar y aprender. Además otro atractivo de este museo es la Megapantalla Imax, en donde pordrán ver una pelicula en pantalla gigante y con sonido digital.
Para quienes son grandes apasionados del teatro la Ciudad de México tiene una cartelera teatral muy grande y para todos los gustos, así que escogan una obra y después de la función vayan a cenar a uno de los restaurantes de la calle Mazaryk, en Polanco.
Como ven, la Ciudad de México es más que política, tráfico y contaminación, es una ciudad maravillosa en la que podemos admirar la riqueza de nuestro país y sentirnos muy orgullosos de ser mexicanos. Feliz luna de miel y ¡qué viva la Ciudad de México!
Los 7 imperdonables en el DF
1. Recorrer el Paseo de la Reforma en Turibús y tomarle una foto al Ángel de la Independecia.
2. Probar sus delicias culinarias como quesadillas, pambazos y barbacoa acompañada de pulque.
3. Visitar la Zona Rosa.
4. Darse un relax en Xochimilco y rentar una trajinera.
5. Ir a Six Flags y disfrutar la emoción de los juegos mecánicos.
6. Visitar la Basílica de Guadalupe.
7. Subirse al metro.