Fuerza de voluntad

La fuerza de voluntad es la capacidad que tienen los seres humanos para cumplir con un plan y conseguir un objetivo. La voluntad se asocia a la libertad individual, la lucha contra la resistencia al cambio. La esencia de la fuerza de voluntad es la realización del objetivo, el que posee fuerza de voluntad, muestra un elevado nivel de autocontrol en la gestión emocional. El impulso de la voluntad es la motivación interior, parte del sí mismo, del self, la conexión entre lo racional y lo emocional.

En la motivación interna la persona realiza una acción por elección, porque la quiere llevar a cabo, puede ser impulsado por el principio del placer; pero, cuando la tarea es por obligación se lleva a cabo por temor al castigo, por miedo o por “deber”. La palabra voluntad se ha sustituido por motivación. En la voluntad la persona determina su propio comportamiento, mientras que en la motivación lo que cuenta es el motivo. O como dice la canción: “Escribir un poema es fácil si existe un motivo, hasta puedo crear mundos nuevos en la fantasía”.

La motivación es una fuerza interna, impulsada por un factor externo, el proceso provoca un comportamiento determinado o modifica uno que ya existe. El término motivación tiene varios significados, comúnmente se conoce como estar animado. En los últimos años el concepto motivación ha adquirido mucha importancia, se utiliza en todas las áreas en las que se desarrolla el individuo, es la energía, el impulso. En cuanto a la educación escolar, para un mejor aprendizaje es necesario estar motivado, el maestro tiene que sacar del alumno esa chispa de curiosidad y motivación; el docente debe integrar un método de motivación, recurrir a varias herramientas como el arte, la creatividad, la musicoterapia.

Para estar motivados y conectar con la fuerza de voluntad es conveniente establecer metas, iniciar con tareas simples y luego progresar hacia metas de mayor alcance. Las metas tienen que ser realistas y alcanzables, de otra manera se sentirán frustrados y pronto se rendirán. Por ejemplo, adquirir disciplina en el entrenamiento para bajar de peso, ahorrar para comprar una casa, un carro, un viaje.

La motivación humana se reduce a la actividad voluntaria. Para la psicología científica existen: las tendencias, las recompensas, los impulsos y los instintos que dan fuerza al comportamiento motivado, es decir, un conjunto de vivencias que dirigen el comportamiento hacia determinadas metas. Existe un gran número de variables que intervienen en el comportamiento motivado, cognoscitivas y afectivas. Las afectivas intervienen en todos los comportamientos mentales. Una variable motivacional debe ser perceptible para distinguir su presencia o ausencia, ser clara, confiable y manifestarse de la misma forma en una persona o en el grupo.

Los que padecen depresión y trastornos de ansiedad conocen el sufrimiento de no sentir esa motivación por nada de lo que los rodea, a esa falta de placer se le llama anhedonia, un síntoma característico del mal funcionamiento bioquímico de manera que necesitan tratamiento; en los estados leves se puede suplir con la práctica de ejercicio, yoga, ejercicios terapéuticos y con el cambio de pensamiento. La clave para mantener la motivación está en el enfoque; la autodisciplina puede no ser él problema. En adicciones como alcoholismo, drogas ilegales, medicinas, trastornos obsesivos compulsivos, la fuerza de voluntad no actúa, es más fuerte la necesidad de satisfactores químicos que produce el circuito del placer en el cerebro.

¿Por qué en muchas ocasiones es tan difícil alcanzar una meta de salud? ¿Es la fuerza de voluntad realmente tan débil? La mayoría de las personas se esfuerzan queriendo tomar decisiones saludables, iniciar un programa de ejercicio para perder peso, cuidar su alimentación, terminar una carrera, ahorrar para comprar una casa, en fin. Comienzan con buenas intenciones, se proponen hacer ejercicio, comer menos, comienzan a ahorrar… pero, pronto se desmotivan, son modelos culturales aprendidos, tenemos que estar consciente de ello.

Recomendaciones

• Establece metas claras, combínalas con acciones diarias para apoyar el objetivo. Por ejemplo, si tu meta es perder peso, camina más, deja el carro a unas cuadras del trabajo, aléjate de la comida chatarra y aliméntate de manera saludable.
• Paso a pasito. ¿Quieres perder unos 10 kilos? No te desesperes, inicia con pequeños cambios como evitar refrescos y bebidas azucaradas, evita el pan empaquetado, prepara tu misma tus alimentos en lugar de comprarlos en la calle; aprovecha el tiempo libre en tus jornadas laborales; estira los brazos y sal a caminar unos minutos.
• Establece nuevas metas. No digas que no tienes tiempo, camina para ir a comprar el periódico, la leche a la tienda, busca pretextos para caminar más. Si tu siguiente meta es dejar de fumar, motívate para realizarla, cambia el placer de fumar un cigarro por una respiración profunda, no permitas que la adicción te gane y la voluntad se rinda.

• Haz lo que más te agrade. Te gusta pasear en bicicleta, patinar, bailar salsa, ¡hazlo! No es indispensable asistir a un gimnasio y levantar pesas, autodisciplínate. Opta por entrenamientos, ejercicios o actividades que te sean placenteras, de otra manera pronto te desmotivarás y volverás a dejarlo.
• Revisa tus pensamientos. Si son negativos, trata de cambiarlos, repite frases en positivo: “Me siento bien, estoy en paz, en mi hay paz”, “¡Sí puedo, lo voy a lograr!”.
• Confía. Si crees que te será imposible llegar a perder 10 kilos, seguramente no pasarás ni de 3 kilos y pronto los recuperarás. Tienes que creer en ti. No es indispensable ingerir medicamentos para bajar de peso, cuidado con las anfetaminas, tienen muchos efectos secundarios. Sé optimista, si lo deseas lo creas.

• Acompáñate de un amigo, tu pareja, un entrenador para hacer ejercicio. Activa tus sentidos: qué veo, qué huelo, qué siento, qué escucho, observa la belleza de la naturaleza, el sudor en tu cuerpo, los latidos del corazón. Estar consciente incrementa el disfrute de la actividad. Cuántas veces no recuerdas ni qué desayunaste, qué comiste el día anterior, comemos de prisa, solo por satisfacer el hambre, no por el placer de disfrutar los alimentos.
• Celebra tus victorias. El éxito refuerza más éxito. A medida que logres cada objetivo, a corto, mediano y largo plazo, tómate un momento para reconocer tus logros. Si bajaste de peso, tómate una foto, elije un portarretrato para que te observes, si dejaste de fumar, olfatea tu ropa, podrás recuperar el olfato, el olor erótico de la pareja; las feromonas son sustancias químicas que el cuerpo despide para atraer sexualmente a miembros de la especie.
• Si nuestro entorno nos parece frío, vamos prendiendo el fuego, tenemos todo para disfrutar de un gran guisado, la motivación, son los ingredientes, y dependen de cada uno de nosotros.

* Dra. Rosa Chávez Cárdenas es psicóloga, homeópata y terapeuta, contáctala en: www.rosachavez.com.mx [email protected] https://twitter.com/DrRosaCh https://www.facebook.com/Tratamientointegral/