The Pianist (2002)
Sentarse en una sala oscura y ver cómo se proyectan las imágenes sobre una pantalla blanca, mientras el sonido te envuelve y transporta a un ambiente distinto, lugares que solo la magia del cine te hacen vivir, momentos grandiosos; bueno, no siempre es placentero, y no lo digo por la película The Pianist, que es una maravilla, sino por la temática cruda que aborda el filme.
Por tercera vez consecutiva comento una película del maestro Roman Polanski, que ganó distintos premios, entre ellos mejor película y mejor dirección, además, Adrien Brody se llevó el Oscar al mejor actor protagonista. Polanski toma el texto autobiográfico de Wladyslaw Szpilman “El pianista del gheto de Varsovia” y hace la adaptación fílmica.
Con la llegada de las tropas alemanas a Polonia empieza el declive del mundo de Szpilman, músico polaco de origen judío, quien deja la radio de Varsovia tras el bombardeo que afecta a toda la ciudad. Szpilman se reúne con su familia, que tienen esperanza de que el conflicto termine pronto, ya que el Reino Unido y Francia han declarado la guerra a Alemania.
Sin embargo, la condición y derechos de los judíos se ve limitada, tienen que portar el brazalete con la Estrella de David y son obligados a vivir en el Gheto de Varsovia, donde pasan hambre, persecución y humillaciones por parte de los nazis. El gheto es un paso antes de la muerte, porque de ahí son deportados a los campos de exterminio en Trebilnka. Cuando los van a trasladar, Szpilman es separado de su familia y con ello se salva de una muerte segura.
Para sobrevivir, trabaja como esclavo en el gheto, pero con la ayuda de algunos amigos logra escapar y vive escondido en edificios demolidos, desde ahí ve las atrocidades que los nazis cometen: golpizas, incendios, palizas y masacres; pero tiene la esperanza de que sus amigos no judíos lo ayuden.
En medio de una ciudad deshabitada y destruida por completo, Szpilman está a punto de morir por desnutrición y enfermedad —en pocas palabras, está confinado a un infierno—, entre los escombros busca alimentos y encuentra una lata de conservas que intenta abrir desesperadamente, es ahí cuando el capitán Wilm Hosenfeld (Thomas Kretschmann) lo encuentra, sabe que es un pianista por lo que pide que interprete algo, él ejecuta una pieza de Chopin, el capitán se conmueve y le perdona la vida, lo mantiene escondido y le lleva alimentos.
Con la entrada del Ejercito Rojo, los alemanes se ven obligados a retirarse de Varsovia, por fin puede salir de su escondite sin que corra peligro porque se identifica como ciudadano polaco. Las tropas aliadas toman presos a soldados y oficiales alemanes, entre ellos va el capitán Wilm Hosenfeld, quien pide apoyo a Wladyslaw Szpilman para salvar su vida.
Las imágenes que recrea Polanski en el filme son de una crueldad atroz, sin embargo, se podría cuestionar si la ficción supera a la realidad. Si bien, The pianist está basado en el texto autobiográfico Wladyslaw Szpilman, se puede argumentar que la película tiene muchos elementos que Polanski recuerda de su infancia, ya que él también vivió la desgracia de la segunda guerra mundial, pues vivía en Cracovia al inicio del conflicto bélico y era descendiente de judíos, por lo que tuvo que huir y permanecer escondido hasta la liberación hecha por el ejercito soviético.
Aunque The Pianist ya no se puede ver en una sala de cine, es una película que se consigue fácilmente. ¡Disfrútenla!
* Tomás Alatriste, contáctalo en [email protected]
FICHA TÉCNICA
Título: The Pianist
País / año: Alemania, Francia, Reino Unido, Polonia, 2002
Director: Roman Polanski
Reparto: Adrien Brody, Thomas Kretschmann, Frank Finlay, Maureen Lipman, Emilia Fox
Género: drama