Carnage (2011)
Me persigue una obsesión: conocer, en la medida que se pueda, la totalidad de la obra cinematográfica o narrativa de un autor que me haya impresionado. Me gusta esta obsesión, porque de esta forma conozco las diferentes etapas por las que pasa el autor, con sus altibajos, sus temas recurrentes y su estilo característico para contar una historia. Y las películas de Roman Polanski están en la lista de “volver a ver”.
Carnage tiene un sello distinto: el humor; claro, un humor que, yo diría, raya en lo negro. La historia es simple: dos adolescentes tienen una diferencia, discuten y uno golpea al otro. La agresión es el motivo para que Nancy (Kate Winslet) y Alan (Christoph Waltz), padres de Zachary el adolescente agresor, vayan a la casa de Penelope (Jodie Foster) y Michael (John C. Reilly), padres de Ethan, y tengan una reunión de conciliación para aclarar todo malentendido
En un principio todo parece quedar claro, Nancy y Alan van a hablar con su hijo; obviamente, ‘solo hablar’ no parece ser suficiente para Penelope, ella quiere un castigo ejemplar, que vaya de acuerdo a los actos del adolescente. Este pequeño detalle hace que Nancy y Alan vuelvan a entrar, un tanto forzados, a la casa, pero se quieren ver políticamente correctos. De hecho, es el juego de las apariencias lo que mueve a los cuatro padres.
Este nuevo encuentro sale en un tanto mal, entre ellos comienza a haber agresiones verbales directas, insinúan que Zach está mal porque los padres no les han puesto la atención que merecen; esto enfurece a Nancy que sale de la casa gritando, Penelope los pasa de nuevo, porque los gritos de Nancy hacen que los vecinos se asomen por la puerta para enterarse de lo que sucede.
En este punto, la apariencia ya se empieza a descomponer, Nancy y Alan se contradicen, lo mismo pasa con Penelope y Michael; después se da una especie de alianza: los hombres con los hombres y las mujeres con las mujeres; y los defectos personales poco a poco van saliendo a flote, la postura correcta y el respeto se esfuma y el verdadero carácter de ellos aflorar con la ayuda de una botella de whisky de 18 años de añejamiento (creo que el alcohol es mejor que el polígrafo para saber la verdad).
Ya no hay vuelta atrás, todo lo planeado para la cita de conciliación va a terminar mal —no, no estoy contando el final—, porque es claro que las cosas ya no van bien, sin embargo, no sabemos hasta qué punto se puede llegar, qué son capaces de hacer y decir, porque las palabras hieren y cortan con una precisión quirúrgica.
Para quien sea indispensable que una película tenga persecuciones donde se destruye media ciudad, con efectos digitales hiperrealistas o escenas eróticas, pues con Carnage se van a sentir un poco desilusionado. Entonces ¿Por qué tiene tan alta puntuación en las críticas? Yo creo que es la transformación que tienen los personajes, porque cuando salen ya no son los mismos, han cambiado. La máscara que traían puesta se le aflojó un nudo y cayó para enseñar el verdadero rostro.
No es gratuito el título del filme, porque la palabra carnage se traduce como matanza o carnicería, que es precisamente lo que hacen los personajes. Polanski es un maestro, porque sin necesidad de mostrar un charco de sangre, un arma o una brutal pelea, aborda de una manera cruda e irónica la violencia que se vive en la sociedad actual.
¡Que disfruten de un buen fin de semana!
* Tomás Alatriste, contáctalo en [email protected]
FICHA TECNICA
Título: Carnage
País / año: Francia, Alemania, Polonia, España, 2011
Director: Roman Polanski
Reparto: Kate Winslet, Jodie Foster, Christoph Waltz, John C. Reilly
Género: comedia negra