¿Calladita te ves más bonita?

La prudencia es una virtud que ayuda a sembrar las bases de una buena relación con la familia de la pareja. Tú ¿qué tan prudente eres en este sentido? Descúbrelo en el siguiente test.

Por: Arlett Mendoza / Fotografía: FreeImageWorks.com

1. Tu novio te invita a comer a su casa. Tú sabes que su mamá se la pasó horas en la cocina, pero el pollo le quedó algo desabrido. De pronto, ella te pregunta si te gustó la comida. ¿Cuál es tu respuesta?

a) Le dices que fue buena, pero que tu mamá hace un pollo delicioso y le pasarás la receta.

b) Le dices que bien a secas y no emites otro comentario.

c) Omites lo que no te agrado tanto y prefieres comentarle que su sopa y el postre le quedaron deliciosos.

2. Estás platicando con la hermana de tu novio y, de pronto, comienza a criticar a su hermano mayor mayor, tú:

a) Te sumas a la crítica.

b) Cambias el tema, pues sabes que es mejor no meterte en los problemas de familia.

c) La escuchas y tratas de dar algunos comentarios mesurados.

3. Están próximas las bodas de plata de los papás de tu novio, por lo que su familia hace una reunión para planear la fiesta y te toca estar presente, ¿qué haces?

a) Intervienes todo el tiempo para dar sugerencias y cuando no estás de acuerdo con alguien, se lo dices directamente.

b) En toda la reunión no abres la boca.

c) Aportas algunas ideas cuando crees que puedes ayudar.

4. Tu novio y tú se pelearon y llevan algunos días sin hablarse. De pronto, su papá te llama por teléfono para pedirte unos datos y, de pasó, te pregunta por qué no has ido a su casa. ¿Qué le respondes?

a) Aprovechas para quejarte con él de su hijo.

b) Les das la información que necesita y te despides sin contestar a su última pregunta.

c) Le brindas los datos y después, le dices que esperas ir pronto a su casa y saludarlo.

5. Estás en el baby shower de una prima de tu novio y se encuentran todas las mujeres de su familia; de pronto, una de ellas te pregunta que si tuvieras un hijo a quién te gustaría que se pareciera. Tú:

a) Sin pensarlo dos veces, le contestas que, por supuesto, a ti.

b) Le dices que lo único que te importaría es que nazca sano.

c) Le respondes que te agradaría que tuviera rasgos de ambos.

Mayoría de A

“Calladita te ves más bonita”. En la mayoría de las ocasiones la prudencia te falla, esto sucede porque dices lo primero que te viene a la mente. Recuerda que cuando hay asuntos de familia por arreglar, es mejor que lo hagan los miembros más cercanos de ésta. La prudencia es un don que puedes desarrollar si antes de hablar evalúas el impacto que pueden tener tus palabras y acciones en los demás.

Mayoría de B

“En boca cerrada no entran moscas”. Tú prefieres no emitir ningún comentario para no comprometerte; sin embargo, debes tomar en cuenta que la prudencia no está peleada con la comunicación. Trata de abrirte más para que te conozcan, pero siguiendo un justo medio.

Mayoría de C

“En el decir discreto, en el hacer secreto”. Felicidades, eres una persona prudente, sabes elegir los momentos para externar tus opiniones y sabes cuando es mejor mantenerse en terreno neutral. Además, tus aportaciones siempre son valiosas y propositivas. Sigue así.

* Arlett Mendoza contáctala en www.sermexico.org.mx, [email protected].