Bodas de fin de año
y diciembre se han convertido en los consentidos para dar el anhelado “Sí, acepto”
frente al altar. Si tu boda es en esta época del año estos consejos te serán de
gran utilidad.
Comencemos con un poco de
historia. Hubo una época antes del Concilio Vaticano II en la cual estaba
prohibido celebrar matrimonios durante los 40 días de adviento y durante los 40
días de cuaresma. Esta era la razón por la cual los tres primeros fines de
semana de noviembre estaban llenos de bodas puesto que habría un periodo de
seis semanas en las que sería imposible contraer matrimonio religioso, lo mismo
pasaba en marzo o febrero, días antes de cuaresma. A la par de ello, los
matrimonios tenían que realizarse durante el día puesto que para recibir la
sagrada Comunión, los fieles debían pasar al menos 24 horas en ayunas, y
esperar hasta la noche resultaba un verdadero sacrificio.
Por fortuna, esto ya
es historia y los novios pueden celebrar sus nupcias en cualquier época del año
—salvo los días Santos para los católicos— y a cualquier hora. Bueno, pues en
esta ocasión hablaremos de las bodas de fin de año que, con todo y frío,
ofrecen un ambiente cálido y sumamente elegante.
Iniciemos con la
novia. Es sumamente importante que la prometida vista de acuerdo a la época del
año en la que se realiza su festejo pues uno de los aspectos fundamentales del
protocolo es lucir acorde a la temporada. Un vestido estraple, aunque hermoso,
no va nada bien en una fría noche. Yo sé que por la emoción del Gran Día quizá
la prometida no piense en este tipo de detalles al elegir su atuendo e,
incluso, ni siquiera sienta frío durante el festejo; sin embargo, los invitados
sentirán que algo no “está bien” y que la anfitriona no luce de acuerdo a la
ocasión. Una torerita, un bolero, una pashmina y hasta una mantilla servirán para cubrirte del frío
y hacerte lucir ad hoc. Detalles como las plumas son un accesorio excelente
para la temporada invernal, claro que pequeñas y discretas. Sobre el calzado,
mi recomendación es zapatilla cerrada, si eres más innovadora, las botas o
botines de novia te vendrán muy bien.
En el caso del novio,
la etiqueta dicta que el prometido deberá portar jaquette si la boda se realiza durante la tarde, esmoquin si
es por la noche y frac para eventos de máxima gala; pero, si la boda es a la
seis de la tarde se entrará al templo con luz del día aunque al salir sea de
noche, en este caso, lo más lógico será tomar como referencia la hora en que
comienza la celebración, estarán de acuerdo conmigo que el protocolo dicta el
uso del jaquette.
Para el banquete
elige más platillos calientes que fríos y prefiere sopas en lugar de ensaladas.
Considera que se consumen menos líquidos como refrescos y hielo, en este caso
una barra de café y té resultan excelentes. Ofrece una mayor variedad de
postres para ayudar a tus invitados a conservar el calor. En lugar de buffet
opta por platos servidos en cada lugar.
En cuanto al lugar
del evento, los espacios cerrados son la mejor opción para las bodas de noche
en esta época del año, sobre todo considerando a las personas de mayor edad que
asistirán a tu fiesta. Si optas por un jardín alquila toldos con cortinas y
calentadores para propiciar un clima más agradable.
Decorar con flores de
nochebuena y velas en estas fechas, así como usar una gama de colores
navideños —sin exagerar en ello—, puede ser bastante agradable, sólo habrá
que cuidar que la fiesta no parezca posada, esto puede suceder si se abusa de
los detalles navideños.
Regalar pashminas o rebozos a sus invitadas es un gesto que será muy
bien recibido por las asistentes, pues ya entrada la noche se antoja estar
resguardado por una prenda calientita.
Hay que considerar
que los días son más cortos y las noches más largas. Si tu boda es durante el
día, toma en cuenta que a eso de las siete de la noche ya no habrá luz natural
por lo que, si tu festejo se extenderá hasta estas horas, deberás tomar las
precauciones necesarias para que tus invitados no se queden en penumbras. Por
otro lado, al ser las noches más largas, la fiesta tiende a terminar un poco
más temprano pues inconscientemente pensamos que hemos estado demasiado tiempo
fuera de casa.
Las bodas de otoño en
los países fríos tienen un encanto particular ya que las hojas de los árboles
se tornan de un hermoso color rojizo. Retomando este bello detalle, resulta una
excelente idea obsequiar a los invitados separadores de libros en forma de hoja
otoñal, los invito a conocer esta y otras opciones en las oficinas de la
Asociación de Consultores Nupciales de Jalisco.
Finalmente, les
recuerdo que estas son sólo sugerencias, nada es ley y nada está escrito, los
novios son los que dictan lo que sucederá en su boda y todos aquellos que los
aprecian compartirán su alegría sin importar cuál sea su decisión.
¡Enhorabuena!