Receta para eliminar la pasión de tu matrimonio
Muchas veces, las parejas comentan que las cosas ya no son igual que antes de casarse, cuando el tema de la pasión era tan distinto, y lo peor: ni siquiera saben qué pudo haber pasado.
A todas aquellas que ni de broma desean que esto les suceda, les traigo la receta perfecta para eliminar la pasión de su matrimonio, ¡revísenla! Es posible que se encuentren preparando el menú que menos les gusta y ¡ni cuenta se han dado!
Primero, con agenda en mano, programa todo encuentro pasional. Recuerda que siempre será más importante buscar el “momento oportuno” para estar juntos y ahora que están casados, muchos temas te resultarán “más importantes” que tu vida de pareja.
Segundo, procura no contar con “privacidad”. Esto lo puedes lograr viviendo con tú suegra o con tú mamá; así cada que quieras tener un encuentro amoroso con tú pareja, siempre habrá alguien que pueda incomodarse resultando más apropiado postergarlo para después.
Tercero, trabajen mucho todo el día y dedíquense ambos a sobresaturar su agenda con compromisos laborales, amigos, compras, pagos de la casa, visitas a la familia, compromisos sociales, etcétera. De esta manera, al llegar a casa, sólo tendrán deseos de irse a dormir y limitarán el momento a un beso y, quizá, un buenas noches, no más, pues estarán exhaustos.
Cuarto, ten siempre en mente la idea de que el sexo es una “cuestión seria” y, por lo tanto, deberá cumplir un estándar de tiempo, ritmo, lugar, hora, forma… Así, cuando de pronto las cosas se presten para alimentar la pasión de manera rápida con tu pareja, tú pondrás miles de pretextos pues no está bien “a esta hora”, “ya se tienen que ir al trabajo”, “aquí no se puede”, etcétera.
Quinto, vuélvete insensible a las necesidades de tú pareja o al sentimiento que te exprese con relación al ritmo y frecuencia de los encuentros pasionales entre ustedes. De esta manera lograrás que se sienta fuera de lugar, no comprendido, ignorado o que, simplemente, decida no volver a expresarte lo que siente o piensa sobre el tema, pues habrá encontrado en tu conducta un asoluto desinterés.
Y sexto, si estás en un momento de pasión, recuerda siempre estar preocupada por todo lo relacionado con tu casa, los niños, el trabajo, no te concentres en vivir el momento y ni se te ocurra disfrutar ese tiempo tan deseado con la persona que más amas. De esta manera, tu pareja percibirá desinterés de tú parte y, con suerte, ya no te invite a vivir momentos pasionales con tanta frecuencia.
Bueno ahora que tienes la receta, date a la tarea de revisarla a detalle y si, por casualidad, haz estado cumpliéndola al pie de la letra, tal vez sea momento de cambiarla por una que te brinde mayores satisfacciones, ¿no lo crees? No puedes darte el lujo de no disfrutar a esa persona que tanto amas.