A unas cuadras del céntrico Paseo de la Reforma, se encuentra esta mansión de la era porfiriana, que con fachadas rosadas y vistosos balcones de época, rescata la elegancia urbana de principios de siglo XX en el cruce de dos avenidas. Completamente restaurado este bello edificio ha sido catalogado monumento artístico por el Instituto Nacional de Bellas Artes.

Mientras las fachadas de La Casona conservan el encanto y la estética de una época, su interior ofrece el confort de la modernidad en la variedad y calidad de sus servicios y espacios, donde podrá disfrutar tanto un desayuno, una excelente comida, o una refrescante copa en una terraza rústica. No obstante, además de ofrecer el estilo y la experiencia de la mejor hotelería europea, se caracteriza por definir un nuevo concepto de hotel pequeño en la gran ciudad, donde a modo de casona, se distingue por su sello acogedor y una esmerada atención. De igual manera, y aunque las habitaciones presentan una variada decoración, prima en ellas un criterio de sencilla elegancia en sus cálidos pisos en madera y exquisito mobiliario que realzan el carácter íntimo y personal de este hotel.

Y desde este punto histórico y escenario privado, podrá recorrer también la historia de esta ciudad. A muy corta distancia hacia el oeste, se divisa el romántico Bosque de Chapultepec coronado por su castillo, que ofrece una espléndida vista de la ciudad, o bien puede visitar el excelente Museo de Antropología e Historia. Hacia el este llegará a la cosmopólita y atractiva Zona Rosa, y desde aquí, podrá desplazarse al corazón de la ciudad, el Zócalo.