Newsmakers (2009)

Publicado por Tomás Alatriste en viernes, agosto 24, 2012 · Deja tus Comentarios

El título original de esta película rusa es impronunciable: Goryachie novosti, por lo menos para mí, mejor me quedo con la traducción al inglés Newsmaker.

La violencia ya es parte de
nuestra realidad, hasta cierto punto nos acostumbran —y digo nos acostumbran,
porque en los noticieros los asesinatos y los ejecutados siempre están en
primera plana—, el comentario es porque esta película cuenta los enfrentamiento
que tiene la seguridad pública con los delincuentes.

Un comando especial está
tras la pista de una banda criminal; por error de un agente vial, los
delincuentes descubren el plan y abren fuego contra los detectives encubiertos,
el saldo muchos policías muertos y la huída de los criminales. Por supuesto que
está en duda la eficacia de la policía, pero lo que más les preocupa a las
autoridades es una cuestión mediática, la falta de credibilidad por parte de la
ciudadanía (esto parece más
realidad que ficción).

Como
las operaciones no han dado resultados positivos, la capitana Verbitskaya
(Mariya Mashkova) tiene una propuesta: hacer un reality show de la captura de los criminales (como lo vio en tv), pretende
transmitir en vivo cada una de las acciones de las fuerzas armadas. Para
lograrlo contrata los servicios de una cadena televisiva, instalan cámaras en
los cascos de los militares y contratan a un director de cine para que dirija
toda la operación; el operativo más que policíaco se convierte en una guerra de
medios que los delincuentes saben enfrentar.

La
película resulta interesante por su gran dosis de acción y giros en la historia
de los personajes, además, no podemos negar que la televisión forma parte de
nuestra cultura, por eso viene a cuento la novela “Raiting” de Alberto Barrera
Tyszka, que narra como una cadena televisiva aprovecha los estragos que deja el
temporal de lluvias para hacer un reality
show con los damnificados, el único fin: aumentar la audiencia, a cambio,
ofrece de premio una casa. Es una novela que deja deslumbrado, no por el
glamour de la televisión, sino por las pasiones de los personajes que se van
descubriendo en la medida que se avanza en la historia.